Contenido
- Es un perro muy sensible
- ¿Tiene alguna llaga, dolor o picazón?
- Trauma
- ¿Qué hacer si a mi perro no le gusta que le toquen la cola?
- ¿Cómo tratar este problema?
Todos tenemos nuestras debilidades en lo que se refiere al cuerpo, especialmente los perros, que son criaturas muy sensibles a todo tipo de contacto. Algunos se sienten incómodos cuando les tocas las orejas, otros sienten sus patas y a otros no les gusta que les toques la cola.
Y hablando de esto, como puede ser un fenómeno muy común, muchas personas se preguntan ¿Por qué a mi perro no le gusta que le toquen la cola?? Esto puede suceder por muchas razones, algunas físicas y otras emocionales o psicológicas. Lo importante es estudiar cada caso por separado y ver si es un tema simplemente sobre tus gustos, o si hay otra causa.
Si esta es una situación que le está pasando a tu mascota, entonces te invitamos a leer este artículo de PeritoAnimal donde te explicaremos qué pasa cuando intentas tocar o peinar la cola de tu perro y él no te deja, alejarte o intentarlo. para decirte que no con la boca.
Es un perro muy sensible
Tu cachorro puede ser del tipo hipersensible y esto es totalmente normal en el mundo canino. Así como a ti no te gustan ciertas cosas porque te causan muchas sensaciones desagradables, tu perro también.
La zona de la cola es una de las partes más controvertidas del cuerpo de los perros. Cuando está muy cerca del ano, muchos pueden sentir que cuando toca su cola, se está acercando demasiado a sus partes privadas, por lo que ni me gusta ni lo veo como una caricia, sino más bien como un robo.
Según varios estudios en animales, sin razón aparente, al 90% de los cachorros no les gusta que los toquen en la cola.
¿Tiene alguna llaga, dolor o picazón?
Si Solía hacerlo antes y todo estuvo bien, pero de repente tu perro reacciona negativamente a este tipo de contacto y estás siendo lo más gentil posible, lo primero que debes hacer será Llévalo al veterinario. No espere demasiado, su perro puede tener una herida o sentir dolor.
Quizás en el último paseo por el parque algún perro lo mordió o algún insecto lo mordió mientras descansaba en la hierba. La herida de un perro no siempre tiene que sangrar mucho o el perro muestra signos de dolor, por lo que es una buena idea consultar a su veterinario ante la primera reacción negativa al tocarla. Si la cola de tu cachorro es muy peluda y esponjosa, es difícil ver si tiene una herida.
Por otro lado, yo sabía que los perros pueden romperse la cola? Las colas de los cachorros se rompen con bastante facilidad, especialmente las más largas. La cola de un perro está formada por pequeños huesos que se mantienen unidos por las articulaciones. Los huesos pueden romperse o fracturarse, mientras que las articulaciones pueden moverse.
Si ves a tu perro caer desde una altura, pisarle la cola por accidente, lastimarse por algo o ha sido mordido por un perro, acércate y hazle un examen físico completo para localizar posibles dolores resultantes en lesiones. Algunos síntomas de una cola rota incluyen incapacidad para flexionarse, cola torcida, dolor y dificultad para moverla.
Trauma
¿Es esta una reacción habitual? si tu perro nunca le gustó que le tocaras el rabo, esto puede deberse a algo que le sucedió en su primera etapa de vida cuando aún era un cachorro. Recuerda que muchos miedos, fobias e incluso dolores ocurren por algún evento traumático ocurrido en el pasado.
¿Has sido el perro desde que eras un cachorro? ¿Sabes cuál es tu historia? Puede ser que su perro haya sido mordido en la cola por otro perro o animal o que un dueño anterior lo haya lastimado. Si le amputaron la cola, también puede haber ocurrido en su etapa adulta o cachorro, lo que le causó un gran temor al recordar este hecho.
satisfacer la historia pasada de nuestras mascotas, nos ayuda a comprender determinados comportamientos, personalidades y formas de reaccionar ante las circunstancias. Investiga un poco y si llegas a la conclusión de que tu perro puede estar sufriendo un trauma, consulta con un etólogo o un educador canino, profesionales que te ayudarán a resolver esta situación.
¿Qué hacer si a mi perro no le gusta que le toquen la cola?
Una vez que haya explorado las razones por las que a su cachorro no le gusta que le toquen la cola, lo más importante que debe hacer es evitar invadir su privacidad. Si invade tu espacio y no te gusta que te acerques, puede provocar una reacción en él de la que luego te arrepentirás. Podría morderte o intentar cualquier actitud agresiva hacia ti.
Si su perro no se siente cómodo con este tipo de contacto, no trates de forzarlo o entrenarlo para cambiar el comportamiento. Lo más sabio que puedes hacer como dueño sería dejarlo y hacer las paces con la idea de que a tu perro no le gusta que le toques la cola, por muy peluda y suave que sea, y por mucho que quieras tocarle. eso. Lo máximo que puedes hacer es intentar tocarla de otra manera. Es posible que tu cachorro sienta que lo estás tocando demasiado fuerte, así que trata de hacerlo con más suavidad mientras le das un masaje relajante desde la cabeza hasta la cola.
¿Cómo tratar este problema?
Si quieres poder tocar al perro, es normal que intentes solucionar estos problemas en casa, pero la verdad es que dependiendo de la reacción del perro, esta puede ser o no una decisión apropiada. Si su perro gruñe para hacerle saber que debe detenerse, es una situación positiva, ya que le advierte que no es de su agrado. En estos casos debemos respetar lo que no te gusta y evitar tocarte la cola. Quizás con el tiempo, el cariño, el uso de refuerzos positivos y la confianza necesaria, en algún momento, permítete tocar o cepillar esta zona.
Sin embargo, si marca o muerde tu mano al tocar casualmente la cola, hablamos de una situación más grave y que puede ser un problema, sobre todo cuando extraños quieren interactuar con ella.
Si la fuente de este miedo es porque un niño le ha tirado de la cola, entonces la situación puede convertirse en un problema mayor, especialmente si muerde a un niño pequeño. Ahí es donde deberías recurrir a un profesional. La modificación del comportamiento canino siempre debe ser realizada por un etólogo (un veterinario especializado en comportamiento canino) o un educador o entrenador canino experimentado.