Contenido
- Síntomas de un ataque de epilepsia en perros
- Epilepsia canina: diagnóstico diferencial
- ¿Cómo actuar ante el ataque epiléptico de un perro?
La epilepsia canina es una patología que se manifiesta a través de ataques epilépticos recurrentes, por tanto, como cuidadores, si convivimos con un perro afectado por esta enfermedad, debemos saber como actuar para evitar agravar el cuadro clínico. Además, es importante distinguir la epilepsia de otras posibles causas de convulsiones y, si nuestro veterinario ha diagnosticado esta enfermedad y prescrito tratamiento, debemos cumplir estrictamente con el fin de reducir el número de convulsiones y por tanto el daño que pueden producir.
A continuación, en este artículo del Experto en animales, mostraremos qué hacer ante un ataque de epilepsia canina. Sin embargo, recuerde seguir las instrucciones de su veterinario y hacer las citas necesarias.
Síntomas de un ataque de epilepsia en perros
La epilepsia es una enfermedad muy compleja que afecta al cerebro. Se produce una actividad anormal y repentina en la red neuronal que puede desencadenar ataques de epilepcia que será recurrente y se caracterizará por convulsiones. Como veremos, no todas las convulsiones en los perros son provocadas por la epilepsia, de ahí la importancia de un diagnóstico correcto, que también nos permitirá saber cómo afrontar un ataque de epilepsia en perros.
Las crisis epilépticas reales constan de las siguientes fases:
- Pródromo: es el período anterior a la actividad epiléptica. Pueden ocurrir cambios de comportamiento que ayuden al cuidador a reconocer esta fase, como inquietud, ansiedad o más apego de lo habitual. Puede durar horas o incluso días, aunque no siempre está presente.
- Aura: esta fase puede no ser fácilmente reconocible. Esto marca el comienzo de la crisis. Se pueden observar vómitos, micción y defecación.
- período ictal: es la convulsión en sí, en la que se producen movimientos involuntarios, comportamientos anormales, etc. Su duración varía desde unos segundos hasta varios minutos y puede ser parcial o generalizada.
- período post-ictal: después del ataque epiléptico, el animal puede presentar un comportamiento extraño y un aumento de la desorientación o disminución del hambre, insuficiencia de orina y heces, nerviosismo, sed o algunos déficits neurológicos como debilidad o ceguera. La corteza cerebral aún no está recuperada. La duración de este período varía enormemente, desde segundos hasta días.
Dependiendo de los síntomas, las crisis de epilepsia pueden ser focales, originadas en un área particular de un hemisferio cerebral, desencadenadas en ambos hemisferios cerebrales, o focales que evolucionan hacia generalizadas, partiendo de una región del cerebro y terminando involucrando ambos hemisferios. Estos últimos son los más habituales en los perros. Además, la epilepsia puede ser idiopática o estructural.
Epilepsia canina: diagnóstico diferencial
Dados los síntomas de un ataque de epilepsia en perros, podemos saber si realmente se trata de esta enfermedad o, por el contrario, los ataques tienen otra causa. Para el diagnóstico diferencial, consideremos:
- el síncope: En este caso, el perro colapsa repentinamente y se recupera de la misma forma. En la sección anterior, ya hemos visto cuánto dura un ataque epiléptico en los perros y en qué etapas se desarrolla. La mayoría de las convulsiones epilépticas son breves.
- alteraciones vestibulares: el animal estará consciente y los síntomas durarán mucho más.
- la narcolepsia: el animal estará dormido, sin embargo se puede despertar.
- el ataque de dolor: nuevamente el animal estará consciente, se posicionará en diferentes posturas y por un tiempo considerable.
- intoxicaciones: en este caso, las convulsiones suelen ser continuas o se repiten cada pocos minutos. Además, entre convulsiones se pueden observar otros síntomas como debilidad, diarrea o falta de coordinación, mientras que en la epilepsia, tras la convulsión se puede dar un período de calma, aunque el perro parece aturdido.
En la siguiente sección, veremos qué hacer ante un ataque epiléptico en perros.
¿Cómo actuar ante el ataque epiléptico de un perro?
Lo primero que debe hacer frente a un ataque de epilepsia en perros es mantener la calma, lo que puede resultar difícil dado que las crisis suelen ser espantosas. Durante ellos, debemos asegurarnos de que estemos alejados de la boca del perro, ya que este no es consciente y usted puede ser mordido, especialmente al intentar sacar la lengua de la boca. No debes poner nada entre los dientes del animal.
Si el perro se encuentra en un lugar peligroso donde puede resultar herido, debemos Muévelo a un lugar seguro. De lo contrario, podemos esperar unos minutos, hasta que se detenga la crisis, e ir de inmediato al centro veterinario e intentar aportar la mayor cantidad de información posible para que el diagnóstico sea más fácil, ya que es posible que al llegar a la clínica la crisis haya remitido. y el veterinario no puede verla.
Para que sea más fácil, puede grabarlo. Si la crisis no cede en 5 minutos, nos enfrentamos a una emergencia que debería ser inmediata. atendido por el veterinario, ya que pueden producirse graves daños cerebrales e incluso la muerte del perro.
Este artículo es meramente informativo, en PeritoAnimal.com.br no podemos prescribir tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Sugerimos que lleves a tu mascota al veterinario por si presenta algún tipo de afección o malestar.
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