Contenido
- ¿Qué es la toxoplasmosis?
- Contagio de toxoplasmosis
- Detectar toxoplasmosis
- Prevenir la toxoplasmosis en gatos
- Tratamiento de la toxoplasmosis en gatos
- Mujeres embarazadas y toxoplasmosis
Cuando hablamos de toxoplasmosis nos referimos a una enfermedad de tipo infeccioso que puede afectar a los gatos. La enfermedad se vuelve realmente preocupante si el dueño del gato es una mujer embarazada.
Es una enfermedad que puede transmitirse (apenas) al feto de la mujer embarazada y, por ello, es motivo de preocupación por parte de algunas familias.
Si estás preocupado y quieres descartar que tu gato padezca toxoplasmosis, en PeritoAnimal te ayudamos con información útil e interesante. Entonces, sigue leyendo este artículo y aprende cómo saber si tu gato tiene toxoplasmosis.
¿Qué es la toxoplasmosis?
La toxoplasmosis es una infección que puede transmitirse al feto. Las posibilidades de que esto suceda son muy bajas, sin embargo, de cara a un embarazo, es completamente comprensible que muchas mujeres estén interesadas en el tema e intenten averiguar cómo pueden identificar la toxoplasmosis.
El parásito de la toxoplasmosis se puede encontrar en carne cruda y heces de gatos infectados, básicamente transmitiendo a través del contacto directo con uno de estos dos elementos. Puede suceder que lavemos incorrectamente la caja de arena del gato y la infección se propague.
Aproximadamente el 10% de los gatos de todo el mundo la padecen y aproximadamente el 15% son portadores de esta enfermedad que suele contagiarse cuando el gato se alimenta de animales salvajes como pájaros y ratas.
Contagio de toxoplasmosis
Como se mencionó anteriormente, la toxoplasmosis se transmite a través del contacto directo con las heces del animal infectado o a través de la carne cruda. Por eso muchos veterinarios recomiendan recoger las heces de la caja de arena con guantes, de esta forma se evita el contacto directo. También recomiendan no manipular carne cruda.
El contagio puede ocurrir en cualquier etapa del embarazo, aunque es realmente grave cuando ocurre en los primeros tres meses, durante la formación del embrión. El contagio puede ocurrir sin que nos demos cuenta, ya que es un enfermedad asintomática, es decir, no presenta síntomas claros que nos hagan identificar la enfermedad.
Detectar toxoplasmosis
Como mencionamos antes, la toxoplasmosis es una enfermedad asintomática, esto quiere decir que al principio el gato infectado no presenta síntomas claros de estar padeciendo una enfermedad. Sin embargo, podemos detectar algunas anomalías en el gato si padece toxoplasmosis como las siguientes:
- Diarrea
- defensas bajas
- Fiebre
- Falta de apetito
- respiración dificultosa
- Apatía
Para detectar la toxoplasmosis, se recomienda realizar un análisis de sangre a nuestro gato en su veterinario habitual. Esta es la prueba más confiable que revelará si el animal está realmente enfermo. No se recomienda el análisis de heces ya que no es determinante en todas las etapas de la enfermedad.
Prevenir la toxoplasmosis en gatos
toxoplasmosis se puede prevenir con una dieta adecuada a base de productos envasados, como croquetas o comida húmeda, fundamentales en la dieta del gato. Retirar los alimentos crudos es la mejor opción, sin duda.
La mayoría de los gatos domésticos viven en interiores, por este motivo, si el animal tiene sus vacunas al día, come comida preparada y no tiene contacto con otros animales del exterior, podemos estar relajados, ya que es poco probable que padezca esta enfermedad.
Tratamiento de la toxoplasmosis en gatos
Tras realizar un análisis de sangre y haber confirmado la presencia de toxoplasmosis en el gato, el veterinario emite un diagnóstico y es entonces cuando podemos iniciar el tratamiento para combatir la enfermedad.
En general, se aplica un tratamiento con antibióticos durante dos semanas, por vía parenteral u oral, aunque generalmente se aplica la segunda opción. En PeritoAnimal recordamos la importancia de seguir las indicaciones del veterinario si padeces la enfermedad, por este motivo debemos seguir atentamente todos los pasos indicados, especialmente si hay una mujer embarazada en casa.
Mujeres embarazadas y toxoplasmosis
Si nuestro gato lleva mucho tiempo infectado o si hemos tenido un gato que padecía de toxoplasmosis anteriormente, puede ser que la gestante también haya padecido la enfermedad en algún momento, relacionándola por síntomas con un resfriado leve.
Existe uno tratamiento eficaz para combatir la toxoplasmosis en mujeres embarazadas, aunque la mayoría de las veces no necesita ningún tratamiento si la mujer embarazada no muestra signos evidentes de la enfermedad (excepto en casos graves en los que los síntomas persisten repetidamente).
Este artículo es meramente informativo, en PeritoAnimal.com.br no podemos prescribir tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Sugerimos que lleves a tu mascota al veterinario por si presenta algún tipo de afección o malestar.