Contenido
- ¿Qué es el entrenamiento felino?
- Diferencias entre adiestrar y educar a un gato
- ¿Es posible adiestrar a un gato?
- como entrenar a un gato
- sesiones cortas
- Premios y motivación
- metas fáciles
- Evite la manipulación física y el castigo.
- Gesto y comando verbal
- entiende a tu gato
- Uso del clicker
- Trucos para enseñarle a tu gato
- Cómo enseñarle a un gato a sentarse
- Cómo enseñarle a un gato a acostarse
- Cómo enseñarle a un gato a moverse
- Cómo enseñarle a un gato a pararse sobre dos patas
Los gatos son animales muy inteligentes y curiosos, con gran capacidad de aprendizaje. Sin embargo, a muchas personas les puede parecer extraño enseñar cosas y trucos nuevos más allá de la obediencia básica a un gato, dada su reputación de ser animales muy independientes y egocéntricos.
Sin embargo, el adiestramiento felino sí existe, y esta actividad aporta varios beneficios para el bienestar de tu gato, ya que lo estimula mentalmente, le propone diferentes retos en su vida diaria y, por supuesto, enriquece la relación con el tutor. Por eso, si te interesa conocer como entrenar a un gato, lee este artículo de PeritoAnimal hasta el final.
¿Qué es el entrenamiento felino?
El concepto de adiestramiento se refiere al acto de realizar un proceso de aprendizaje con un animal, para que aprenda a realizar una acción cuando se indique, usando un gesto o una orden oral.
Este procedimiento se realiza en todo tipo de animales, con la intención de que aprendan las más variadas habilidades y / o trucos. Desde pequeñas acciones, como patear o sentarse, hasta ejecuciones complejas, como bailar.
Diferencias entre adiestrar y educar a un gato
Este término no debe confundirse con educación, pues si bien este concepto está relacionado con la formación, dado que ambos son procesos de aprendizaje, tienen diferentes propósitos.
La educación es necesaria para que el animal aprender a comportarse y adaptarse positivamente a las diferentes situaciones cotidianas. Por ejemplo, enseñarle a un gato a jugar sin lastimarte implica que lo estás educando para que se comporte correctamente cuando juegas con él. No le estás enseñando un comando específico, como lo haría en el entrenamiento, pero cambiando su comportamiento para que el juego sea beneficioso para ambos. En este artículo, no explicamos como criar un gato, sino más bien cómo entrenar a los gatos para que aprendan comandos específicos.
¿Es posible adiestrar a un gato?
¡Por supuesto! El adiestramiento es un procedimiento que se puede utilizar en todo tipo de animales, ya sean nuestras mascotas, pájaros, roedores e incluso los famosos delfines. Todos los animales capaces de aprender pueden ser entrenados al aprender la teoría del aprendizaje, específicamente, el condicionamiento. Sin embargo, es necesario conocer las necesidades, capacidades y patrones de comportamiento de cada especie para tener metas realistas.
Sin embargo, ¿por qué no estamos tan familiarizados con esta faceta de los gatos en comparación con los perros? Las características individuales de los gatos los hacen más difíciles de entrenar que los perros. En cualquier caso, la afirmación correcta sería que los perros son mucho más fáciles de entrenar por lo que son, perros. Esto se debe a que han convivido con los humanos durante muchos siglos y, como han sido nuestros compañeros durante tanto tiempo, han moldeado su cognición, teniendo una mente mucho más adaptable y un interés en complacernos además de aprender, por lo que se han utilizado para una variedad de trabajos y sabemos más sobre la faceta del adiestramiento canino.
Los gatos, por otro lado, son mucho más instintivos, no necesitas complacernos y no se les exigió que se volvieran propensos a aprender, porque no fueron necesarios con el tiempo para realizar un trabajo específico. Estos animales solo se convirtieron en nuestras mascotas porque originalmente fueron utilizados para ahuyentar a las ratas, un propósito para el que no hay necesidad de adiestrarlos ya que ya lo hacen ellos mismos.
como entrenar a un gato
Entrenar a un gato es un proceso que requerirá constancia, paciencia y comprensión del comportamiento felino. Las pautas que debe considerar son las siguientes:
sesiones cortas
El tiempo que pasas entrenando a tu gato no debe exceder los 15 minutos, varios días a la semana. Eso es porque es seguro que tu gato perderá interés fácilmente, especialmente si has comenzado a entrenarlo recientemente.
Por ello, lo ideal es finalizar la sesión. antes de que tu gato empiece a ignorarte o a distraerse. Siempre debe asegurarse de que su gato se mantenga motivado durante toda la sesión y de que usted finalice la sesión, no él, cuando esté cansado.
Premios y motivación
Es impensable adiestrar a un gato sin utilizar el refuerzo positivo, es decir, sin dar un premio muy valioso cada vez que realiza la acción deseada. Eso es porque el premio motivará a tu gato a aprender y prestarte atención.
El premio en cuestión debe ser algo que solo obtiene durante la sesión de entrenamiento. (por tanto, no vale la pena acariciarlos ni tu ración), algo realmente valioso que el gato asociará con estas sesiones, como comida húmeda, lonchas de jamón, malta para gatos ...
Por último, en muchos de los trucos que puedes enseñarle a tu gato, el premio te servirá de guía a seguir para conseguir que se mueva de la forma que tú quieras para llegar a una posición concreta.
metas fáciles
Durante el entrenamiento, debe establecer pequeñas metas que se acerquen gradualmente al objetivo final, que técnicamente se conoce en el entrenamiento como aumentar el criterio.
¿Que significa eso? Por ejemplo, si quieres enseñarle a tu gato a pararse sobre sus dos patas traseras, primero debes recompensar cualquier elevación que haga con sus patas delanteras y aumentar progresivamente la dificultad. recompensar al gato cada vez que progresa. Es decir, recompensa cuando levanta una pata, luego recompensa cuando levanta dos patas, luego cuánto para mantenerlas levantadas durante unos segundos, cuando levanta el cuerpo, etc. Por lo tanto, no puede querer que su gato pueda pararse sobre sus patas traseras desde el principio, porque no lo entenderá y no lo hará, y terminará frustrado.
Evite la manipulación física y el castigo.
A menudo tendemos a levantar y mover al animal como una muñeca para enseñarle cómo realizar un truco. Este procedimiento no es del todo efectivo porque, por la forma en que aprende, el animal no entiende que necesita adoptar una posición a la que lo obligamos, pero realizar una acción para obtener una copia de seguridad, es decir, el premio.
Usar la manipulación física en los gatos es mucho más contradictorio, ya que aunque los perros, dependiendo de su personalidad, pueden tolerar la manipulación en mayor o menor grado (por ejemplo, cuando les quitas la pata para enseñarles a dar una pata), el gato simplemente lo odia. Para estos animales, ser atrapados es algo que instintivamente se ve como una amenaza, por lo que la sesión de entrenamiento que debe ser motivadora y divertida para el felino resulta desagradable.
Asimismo, castigar a tu gato para que aprenda es simplemente inviable, porque no entenderé es eso generará desconfianza, algo completamente contraproducente si lo que quieres es que tu gato quiera estar contigo y confiar en ti, para que aprenda cosas nuevas.
Gesto y comando verbal
Para enseñarle a su gato a realizar una acción después de preguntar con una orden verbal, primero debe enséñale a obedecer el gesto, ya que por lo general les resulta más fácil aprender a obedecer las comandos visuales.
entonces debes asociar este gesto con un estímulo auditivo, es decir, una palabra corta y clara, que debe ser siempre la misma y en el mismo tono de voz para no crear confusión.
entiende a tu gato
Enseñar a un gato joven no es lo mismo que enseñarle a un adulto; De la misma manera, no deberías tener los mismos objetivos para un gato domesticado que para un gato asustadizo. El límite de lo que puedes y no puedes enseñarle a tu gato será tu bienestar. Es decir, si enseñarle algo a tu gato implica que va a sufrir estrés y / o dolor físico, por la edad, alguna enfermedad o su personalidad ... simplemente debes dejar de enseñar este truco y buscar uno más sencillo, o, obviamente, que no cause molestias al gato, ya que el adiestramiento debe ser una actividad que beneficie a ambos.
Uso del clicker
El clicker es una herramienta muy útil utilizada en el adiestramiento de todo tipo de animales, ya que permite enseñar todo tipo de trucos y las habilidades más espectaculares, respetando su comportamiento natural.
Consiste en una pequeña caja (encaja perfectamente en la mano) con un botón, que cada vez que lo presionas, emite un sonido de "clic" y sirve para decirle al animal lo que está haciendo bien, para que repita el comportamiento.
Para utilizar esta herramienta, primero debe cargar el clicker. Este paso consiste en asociar el sonido de “clic” con refuerzo positivo. Por esta razón, en los primeros días de entrenamiento, solo debes enseñarle esta asociación para crear una buena base para el entrenamiento. Para ello, dale un premio a tu gato y, cada vez que lo hagas, haz el sonido. De esa forma, tu gato entenderá que cada vez que suene el "clic", lo recompensarás.
Trucos para enseñarle a tu gato
Con el uso del clicker, hay muchas posibilidades de lo que puedes enseñarle a tu gato. De hecho, cualquier comportamiento que su gato realice normalmente, como maullar, por ejemplo, puede asociarse con un comando si usted hace un gesto (estímulo visual), hace clic cuando realiza la acción y lo recompensa instantáneamente. Tu gato asociará constantemente este gesto con la acción que acabas de realizar.
¿Aprendamos a entrenar gatos? Para empezar a entrenar a tu felino te recomendamos que lo enseñes trucos sencillos:
Cómo enseñarle a un gato a sentarse
- Tenga el clicker en una mano y el premio en la otra.
- Levanta el premio por encima de la cabeza de tu gato.
- Su gato se sentará y / o se reclinará. Haz clic con el clicker y dale el premio rápidamente.
- Insista durante varias sesiones hasta que su gato esté completamente sentado y asocie levantar el premio por encima de su cabeza con sentarse. Cuando haya hecho esto, asocie esta acción con una orden oral clara como "sentarse" o "sentarse".
Para obtener más información, puede consultar este otro artículo sobre cómo enseñar a un gato a sentarse.
Cómo enseñarle a un gato a acostarse
- Tenga el clicker en una mano y el premio en la otra.
- Pídale al gato que se siente.
- Arrastra el premio de debajo de tu cabeza al suelo.
- Tu gato comenzará a inclinar su cuerpo hacia el suelo. Haz clic con el clicker y dale rápidamente el premio cada vez que se acerque a la posición de acostado. Con insistencia conseguirás que acabe estirándose.
- Una vez que tu gato comprenda el gesto, debes asociarlo con una orden oral como "abajo" o "tierra".
Cómo enseñarle a un gato a moverse
- Tenga el clicker en una mano y el premio en la otra.
- Pídale que se acueste en el suelo.
- Arrastre el premio sobre su espalda de un lado de su cuerpo (lado) al otro.
- Tu gato seguirá el premio con la cabeza, girando su cuerpo de lado a lado. Haga clic con el clicker y entregue rápidamente el premio.
- Cuando su gato entienda el gesto, asócielo con una orden oral como "girar" o "girar".
Cómo enseñarle a un gato a pararse sobre dos patas
- Tenga el clicker en una mano y el premio en la otra.
- Pídale al gato que se siente.
- Arrastra el premio por encima de tu cabeza para que te siga, levantándose del suelo.
- Recompénselo cuando haga el menor levantamiento del suelo (incluso si es solo una pata), use el clicker y entregue el premio. Sigue aumentando este criterio de forma progresiva.
- Una vez que aprenda a levantar las patas delanteras, aumente gradualmente la cantidad de tiempo que debe aguantar (es decir, primero un segundo, luego dos, etc.).
- Cuando su gato comprenda el gesto, asócielo con una orden oral, como "pararse".
Si te gustó este artículo, mira también nuestro video que explica cómo ganarte la confianza de tu felino: