Contenido
- Morkie: origen
- Morkie: características
- cachorro morkie
- Colores de Morkie
- Taza de té o juguete Morkie
- Morkie: personalidad
- Morkie: cuidado
- Morkie: educación
- Morkie: salud
- Morkie: adoptar
Sin duda te sorprenderás cuando descubras la raza de perros que te vamos a presentar a continuación, los Morkies, unos peculiares cachorros que emergen del cruces entre el Yorkshire Terrier y el Maltés. Estos perros tienen características muy especiales, como su lealtad y atrevimiento.
¿Quieres conocer mejor a los cachorros de Morkie? En este artículo de PeritoAnimal te explicaremos todos los Características de Morkie, tu personalidad y cariño. ¡Sigue leyendo!
Fuente- America
- Canadá
- Estados Unidos
- muscular
- previsto
- juguete
- Pequeño
- Medio
- Genial
- Gigante
- 15-35
- 35-45
- 45-55
- 55-70
- 70-80
- más de 80
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- 3-10
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- 8-10
- 10-12
- 12-14
- 15-20
- Bajo
- Promedio
- Elevado
- Fuerte
- Inteligente
- Tierno
- Dominante
- pisos
- Vigilancia
- Frío
- Cálido
- Moderar
- Medio
- Largo
- Frito
Morkie: origen
la carrera de Morkie surgió en los años 80 cuando un criador decidió criar un Yorkshire Terrier con un Maltés. Después de este cruce, nacieron los primeros cachorros de Morkie. Al igual que otras razas que han surgido del cruce entre dos razas caninas conocidas, los Morkies no han sido registrados como raza autónoma por ninguno de los organismos cinológicos internacionales. Estos cachorros son muy populares, y es común que se conviertan en mascotas de personalidades del mundo del cine, la música y el deporte.
Morkie: características
Un Morkie es un perro de talla pequeña, cuyo peso suele oscilar entre 2,5 y 5 kilos. Su altura varía entre los 15 y 31 centímetros y su esperanza de vida ronda los 10 a 13 años.
El cuerpo de un perro Morkie es compacto, con extremidades cortas y musculosas, aunque generalmente son mucho más largas que las de un maltés. La cola es de longitud y grosor medio. La cabeza es mediana, con un hocico ancho, redondo y oscuro, generalmente negro. Sus orejas son caídas y cuelgan a los lados de la cabeza, siendo gruesas y cubiertas con una densa capa de pelo. Los ojos son redondos, de color oscuro, de aspecto afable y vivaz.
LA abrigo de un Morkie es largo y denso y destaca por su suavidad, con una capa interna similar a la lana que ayuda al aislamiento térmico de estos cachorros. No cambia de pelo, por lo que se le considera uno de los perros hipoalergénicos.
cachorro morkie
Los cachorros de Morkies son realmente adorables como son pequeñas bolas de piel que solo quiera jugar y recibir cariño. Al igual que otras razas pequeñas, los cachorros suelen ser más delicados y necesitan vigilancia para evitar riesgos y peligros, pudiendo detectar a la mayor brevedad posibles signos de enfermedad, como apatía, llanto excesivo o agresividad sin motivo.
Colores de Morkie
Los colores más valorados y frecuentes entre los Morkies son, plateado, marrón canela, blanco, beige y negro, así como la combinación de los anteriores.
Taza de té o juguete Morkie
Existe una variedad Morkie de menor tamaño, que no supera los 3,5 kilos, por lo que se considera la variante juguete de la raza. A pesar del pequeño tamaño, no existen diferencias entre un Morkie estándar y un Morkie de juguete, siendo iguales en personalidad y morfología.
Morkie: personalidad
Un espécimen estándar de Morkie se caracteriza por tener un temperamento fuerte, destacando la terquedad y determinación. Sin embargo, aunque su gran confianza en sí mismo puede parecer que no necesita nada de nadie, es un perro. muy dependiente. Esto hace que sea necesario brindarles mucha atención y cariño para que no se sientan tristes y solos.
Por otro lado, este perro puede tener problemas para relacionarse con los demás si no se socializa adecuadamente. Estos problemas pueden surgir tanto con otras mascotas como con personas. Esto se debe a su gran desconfianza hacia todo y todos, además de su dificultad para tratar con extraños, algo que desaparece tras ganar confianza en los demás.
Morkie: cuidado
El cuidado más importante de Morkie está dirigido a tratar su adicción. Por tanto, si tienes un Morkie en tu casa, debes tener en cuenta las necesidades típicas de la raza. Uno de los más importantes es lograr que Morkie se sienta querido y atendido en tus necesidades, porque la mayoría de los problemas que pueden sufrir son la ansiedad por separación y el sentimiento de abandono.
Otro tema fundamental está relacionado con tu alimentación. Debes tener mucho cuidado con tu alimentación, ya que se trata de una raza golosa, cuyo adorable rostro puede llevarnos a sobrecargarte de dulces y golosinas variadas. Se recomienda encarecidamente no sobrepasar los límites a la hora de ofrecer snacks, porque el sobrepeso provoca muchos problemas y los perros tienen esta tendencia.
Se necesita cepillar la piel de los cachorros de Morkie a diario, de lo contrario se ensuciará y formará nudos que no se pueden deshacer. Los baños son imprescindibles, recomendando aproximadamente uno cada mes o mes y medio.
Morkie: educación
Con respecto a la educación de Morkies, cabe destacar que para adiestrar a un perro de esta raza lo mejor es hacerlo lo antes posible, de lo contrario el adiestramiento puede volverse muy difícil. De todos modos, uno de los aspectos más relevantes de la formación de Morkie es la socialización. Para que esto sea correcto, adecuado y se lleve a cabo con la mayor facilidad posible, te recomendamos que leas nuestro artículo sobre cómo socializar adecuadamente a un cachorro.
Los Morkies no son exactamente perros fáciles de criar, debido a su fuerte personalidad y terquedad. será necesaria múltiples repeticiones, paciencia y mucho refuerzo positivo. Si bien el castigo no se recomienda en ninguna raza, en esta raza es mucho menos recomendable, ya que podría fomentar más fuertemente el desarrollo de problemas derivados del miedo, el estrés y la ansiedad. Por tanto, es fundamental dejar claro que no es recomendable sobrecargar a los cachorros con sesiones de entrenamiento muy largas o intensas. Lo mejor es establecer una rutina en la que haya sesiones cortas repartidas a lo largo del día.
Morkie: salud
Los Morkies son perros mucho más sanos que sus razas parentales, considerando esto como una ventaja natural de adoptar un perro mestizo. Aún así, hay una serie de enfermedades que pueden afectar a Morkie. Algunas de las más frecuentes son las referidas a los oídos, la boca y los ojos. Entre ellos destacan las cataratas, el glaucoma y la otitis. También pueden heredar enfermedades típicas de los Yorkshire y los malteses, como la dislocación de la rótula, el colapso de la tráquea o la insuficiencia cardíaca valvular crónica.
Para que Morkie goce de buena salud, es fundamental realizar una buena prevención mediante visitas periódicas al veterinario, desparasitación y vacunación. Además, ofrecer los cuidados básicos al perro Morkie expuestos en los ítems anteriores es otra clave que te permitirá convivir con un perro feliz y equilibrado.
Morkie: adoptar
Para saber si está listo para adoptar un perro Morkie, debe considerar todas sus necesidades, que se trataron en este artículo. Si después de considerar todas estas necesidades aún confía en que puede enfrentar las posibles dificultades y asumir la plena responsabilidad del cuidado de un Morkie, le ofrecemos algunos consejos para adoptarlo.
Es mejor, en todos los casos, buscar un asociación o refugio de protección animal, porque así evitas el abandono de animales y le das una nueva oportunidad a una mascota abandonada. Te recomendamos buscar información sobre las entidades protectoras de tu región, para que puedas conocer sus instalaciones y también todos los animales que necesitan un hogar.